BEYTNA
Calle del Moscatelar, 18,
MADRID
Teléfono: 916 14 48 47
Nunca había estado en un restaurante Jordano. Me gusta mucho la cocina especiada, los sabores y aromas de Oriente Medio.
El empleo de la carne de cordero, el yogur, la mezcla de hierbas y especias, curry, azafrán, cúrcuma, canela…
En un mundo tan globalizado es difícil que en otros restaurantes no hayamos probado algún plato tan internacional hoy día como el hummus por ejemplo. La gastronomía árabe en general influenciada por la cocina mediterránea, la turca o la india, le dan en Beytna una vuelta por su manera de cocinar, dándole protagonismo a su horno de leña tradicional y a su parrilla de carbón, una cocina llena de texturas colores y olores intensos.
Como en otras culturas en la árabe la comida está ligada a la hospitalidad y Beytna significa nuestro hogar, así se nota que Mustapha al frente te recibe como si de su propia casa se tratase.


El restaurante se encuentra en una zona muy tranquila, tiene varios espacios, uno de ellos en estos tiempos muy preciado, una bonita terraza que conserva la elegancia del resto del local con mesas completamente vestidas, servilleteros y bajoplatos, que la convierten en un acogedor espacio al aire libre.

Destaca el detalle del relajante sonido del agua de su original fuente formada por tres antiguas tinajas, que imagino mágico en las noches de verano y que sin duda probaré en un futuro próximo.


Escogimos un menú degustación aconsejados por Mustapha y no nos arrepentimos
Compuesto por cuatro entrantes fríos, una refrescante ensalada, el típico Hummus de garbanzos.
Mutabal, una crema de berenjena ahumada con Tahini y ajo y Muhammarah, pimientos asados cremosos con Bulgur, nueces y sirope de granada



Deliciosos todos acompañados por el pan hecho en la casa.
Cuatro entrantes calientes
Fatayer de espinacas, son unas empanadillas triangulares de espinacas con especias de sumac, muy apreciada en Oriente Medio y llamada zumaque en otros países.
Kubbeth frito, unas croquetas de carne y bulgur con cebolla y piñones.
El más conocido Falafel, la típica croqueta árabe de garbanzos con finas hierbas y cebolla.
Y Rollitos de queso, de una masa muy fina rellenos con tres clases de queso.
Todos distintos y todos exquisitos




El segundo plato era a elegir y preferimos que fuese Mustapha quien eligiese por nosotros, ofreciéndonos una variedad al horno de leña
El Tajín de Kofta
Una especie de pastel de carne picada de cordero cocinada con verduras en olla de barro y sellada con pan de pita, un plato sabroso y muy original.
Y otra variedad a la parrilla de carbón
Una parrillada compuesta de una variedad de carnes, kebab, cordero, dados de pollo y chuletas de cordero servido con tomate y cebolla.

Para los postre una selección de tres remataron una copiosa comida.
Aish Al Saraya, un pudin con sirope de azahar, cubierto de almendras, miel, nata y pistacho
Beytna Baklawa, finas hojas de hojaldre rellenas de pistacho molido y jarabe de azahar, mi preferido.
Y Muhalabieh con naranja, un pudín de leche floral con extracto casero de naranja y pistacho.

Para terminar el detalle de la invitación a un té en una sobremesa tranquila


Es un menú muy completo que te da idea de la cocina jordana y que a mí me invitó a seguir probando platos de una carta muy apetecible.