Empezamos nuestras excursiones fuera de Rennes visitando
FOUGÉRES



Lo que más impresiona es su inmenso castillo, uno de los más grandes de Europa excelentemente conservado. Muy recomendable visitarlo y bajo él una villa con casas medievales de entramado de madera, donde lo mejor es pasear por sus calles.



VITRÉ
Algo más pequeño, otro pueblo de postal, y que como primera excursión nos metió de lleno en la Edad Media. Precioso su castillo como de cuento.






En la costa visitamos
SAINT- MALÓ



Ciudad corsaria, amurallada, donde, empezar paseando por su muralla, te da una visión general del sitio. Me llamó la atención una piscina hecha en la propia playa donde debido al mal tiempo solo un par de valientes se atrevieron a bañarse.
La villa eminentemente turística llena de gente con sus calles empedradas y ese glamour que tienen los franceses para decorar locales y terrazas.



Para comer nos desplazamos ese día a
CANCALE
Un pequeño puerto pesquero famoso por sus ostras.



Aunque lo que acostumbran los lugareños y turistas es comprar las ostras a la orilla de la playa y tomarlas sentados en el paseo con un vino.
Nosotros optamos por una mariscada en el restaurante
LE CANCALAIS
12 Quai Gambetta, Cancale, Francia
Un clásico de la zona donde no hace falta que os cuente como nos fue porque la foto lo dice todo. Esta era la pequeña para dos personas. Impresionante y deliciosa


Uno de los pueblos medievales mejor conservados de Bretaña es
DINAN
Tiene un encanto de cuento: casas de madera, callejuelas empedradas, murallas y un puerto fluvial que le da un aire muy especial. Hay que verlo sin prisas, nosotros le dedicamos un día completo



Está situado sobre el rio Rance cuyo puerto deportivo está justo en la parte baja de la ciudad. Es una gozada pasear por sus calles, posee un comercio muy animado plagado de tiendas de artesanía y galerías de arte. A alguno de estos artesanos se les puede ver trabajar en sus propios talleres. Lo mejor es perderse por todos sus rincones.



Para bajar al puerto nos atrevimos por la famosa rue Jezual, muy empinada y parada en el tiempo con sus casas medievales, sus cafés y exposiciones artísticas.



Descanso en un pequeño restaurante a orillas del rio
L’ATELIER GOURMAND
4 Rue du Quai, Dinan, Francia
En su acogedora terraza una cocina tradicional especializados en pescados y mariscos.



Visita obligada al MONT-SAINT MICHEL
¡Que maravilla! Es difícil describir lo que se siente al verlo tan impresionante, a pesar de que no nos hizo muy buen tiempo es una belleza de lejos y de cerca.



Ver la inmensa bahía donde se pierde el horizonte y allí majestuosa la Abadía.
Su historia es apasionante, de leyenda a santuario, de primera iglesia románica a lugar de peregrinación, de fortaleza a cárcel en el siglo XIX. Una transformación que, poco a poco, se convirtió en lo que es hoy día.
Es una experiencia inolvidable.



Siguiendo con los pueblos bonitos
ROCHEFORT-EN-TERRE
Es el típico rincón con encanto. Muy pequeño, para quedarse un ratito contemplándolo, casas de piedra muy bien cuidadas, con muchas flores y pequeñas tiendas de artesanía.






Cerca está
LA GACILLY
Donde paramos al pasar. Famoso porque allí nació Yves Rocher cuyo legado fue un Jardín Botánico y la casa de cosmética. Y promueven un Festival de Fotografía, atractivo turístico.



Para terminar
JOSSELIN
En la línea de los pueblos con encanto, posee un castillo a la orilla del canal que es una preciosidad. Sus calles con las típicas casas de entramado de madera, ideales para un paseo tranquilo.



Recomendable comer en
CREPERIE LA SARRAZINE
51 Chem. Glatinier, Josselin, Francia
Ya os he contado en el primer post de este viaje las bondades del trigo sarraceno y lo ricas que están las galettes típicas que hacen con él. Pues bien en este sitio están deliciosas y las acompañan de una sidra de la zona





